sábado, 3 de julio de 2010

FERNANDO LUGO Y LA MODA DEL COMUNISMO CIPAYO

La Historia del Imperio Británico recuerda que en el año 1857, . la estricta jerarquía del ejército inglés de la Compañía de las Indias Orientales y las abismales diferencias de sueldo y condiciones de vida que existían entre los oficiales británicos y los cipayos, desataron una gran rebelión que trajo como consecuencia la proclamación del virreinato.
La palabra cipayo (shipahi) designaba a las tropas indias que actuaban bajo órdenes de oficiales británicos, y en el momento de la rebelión cuadruplicaban en número a los efectivos ingleses.
En América Latina, es el número de cipayos el que es multiplicado por cientos de veces por los nativos, pero de cualquier manera los primeros siguen sosteniendo la sartén por el mango y realizando genuflexiones ante sus amos, por lo general caballerosas misiones diplomática y humanitarias conectadas como vasos comunicantes a los fondos de USAID, el National Endowment for Democracy y las ONG subsidiarias en las sociedades de la región.
Durante mucho tiempo, la propaganda revolucionaria logró identificar a las oligarquías de estos países con los cipayos de la India, y a los militantes de la izquierda marxista como los patriotas independentistas. La confusión reinante en este tiempo ha logrado, si no revertir estas identidades, al menos equipararlas. Un comunista como vice-presidente del gobierno pro-imperialista de Colombia, y el Partido Comunista de Paraguay son dos ejemplos de ello.
COMUNISMO CIPAYO EN COLOMBIA
Angelino Garzón, el comunista, dirigente sindical y hasta militante de una guerrilla desmovilizada, es el vicepresidente electo de Colombia. Su presidente, Juan Manuel Santos, representa la continuidad de un gobierno de derecha que lleva ocho años en el poder y que, entre otras cosas, suena internacionalmente por la violencia contra sindicalistas, el irrespeto por los derechos humanos y el exceso de fuerza que, como en el caso de las ejecuciones extrajudiciales, el Estado colombiano ejerce en la implementación de la política de mano dura del presidente Alvaro Uribe.
Según reportes periodísticos que llegan desde Colombia, Angelino viaja a Washington con Uribe para demostrar que sí hay sindicalistas que siguen vivos y participando en política. Pero no en la oposición. El oficialismo de derecha fue el que eligió Garzón para continuar su ascendente carrera en las instituciones públicas.
E n Paraguay, el comunismo cipayo logró ser más sutil. Para evitar ser vilipendiado por su incoherencia, contribuyó a difundir a los cuatro vientos que el candidato respaldado por la embajada norteamericana y su prensa subsidiaria, el cura Fernando Lugo, era también un referente de la izquierda marxista y teólogo de la liberación.
Nunca se aclaró cómo un referente de una doctrina condenada por el Vaticano logró llegar a obispo.
En realidad, Lugo había sido apartado por la iglesia pero no por su adicción a la teología de la liberación, sino a las “criaditas para todo uso”, menores indigentes de regiones pobres de Paraguay, de las que abusaba y luego dejaba preñadas en forma absolutamente amoral e irresponsable, en sus años de cura.
LA IZQUIERDA LUGUISTA, EJEMPLO DE OBSECUENCIA
En la página 57 de su nuevo libro "La Agresión Permanente", Eva Golinger afirma con seguridad: "No hay que tener ninguna duda que aquellos que reciben los fondos de las agencias como USAID, NED, NDI, IRI y Freedom House, o el entrenamiento del Instituto Albert Einstein u OTPOR, son agentes del imperio estadounidense; son sus lacayos, susportavoces y siempre estarán bajo su control y dominación".
Con esta definición de una voz autorizada, ya sabemos a quién responden en definitiva Tekojoja y Pmas, los dos grupos principales que rodean a Fernando Lugo.
La mentira fue confesada cuando ya había sido descubierta. No hace mucho el secretario general de Lugo, hombre vinculado a USAID que responde a las empresas del grupo Kanonikoff, reconoció que el gobierno luguista no es de izquierda. Lo hizo después que dirigentes del Pmas haya sido interrogados en Venezuela sobre sus vínculos con la embajada norteamericana de Asunción, y cuando ya era imposible sostener las falacias con agentes norteamericanos y chacales colombianos enviados por Alvaro Uribe, actuando a sus anchas contra la izquierda marxista en territorio paraguayo.
DESAIRE Y ANGURRIA
La nueva estrategia de la izquierda chanta y clerofascista, dadas las circunstancias, consiste en fingir su “desacuerdo” con el gobierno arzobispal, y seguir prendidos de sus puestos prebendarios como si nada sucediese.
En ese contexto, fingen estar “disgustados” porque el cura Lugo ignoró los pedidos de vetar la ley anti-terrorismo y objeción de conciencia. ”Esto provocó el disgusto de varios dirigentes socialistas, aunque los mismos optaron por una actitud mesurada a la hora de criticar al Poder Ejecutivo” dice la prensa vinculada a la embajada norteamericana, la misma que apuntaló el proyecto electoral del cura.

“El Presidente ha promulgado las leyes antiterrorista y de objeción de conciencia, aprobadas por el Parlamento nacional, las cuales, a criterio del Partido del Movimiento al Socialismo (P-MAS), pueden llegar a dañar derechos civiles y constituirse en peligrosas herramientas de represión contra los movimientos sociales y políticos”, señaló Rocío Casco, titular de la agrupación y vieja beneficiaria de las dádivas de USAID, NED, IAF y el Plan Umbral a través del cual la embajada norteamericana mueve los hilos de sus marionetas en el estado paraguayo. Por supuesto, ni soñar con una acción coherente con su crítica y un abandono de los añorados zoquetes en el gobierno arzobispal.

Otro tanto de pura retórica exhibió el Partido Comunista paraguayo, émulo de militantes colombianos como Garzón. “Para el Partido Comunista Paraguayo (PCP), la ley antiterrorista riñe contra el movimiento popular, pues la normativa no define el término terrorismo. Una manifestación o cierre de ruta puede ser interpretado por un juez como terrorismo. Esta norma da lugar a interpretación a los magistrados”, advirtió Najeeb Amado,el Angelino Garzón paraguayo.

Los dirigentes campesinos Luis Aguayo y Elvio Benítez también advirtieron los alcances negativos que tendrá la nueva ley. Ambos referentes del Frente Guasu, además del senador Sixto Pereira (Tekojoja), fueron hace 2 semanas a entrevistarse con Lugo para solicitarle que vete la normativa, sin embargo el Presidente optó por no hacerles caso.
Ser ignorados y humillados por el obispo no implica que deban tener una actitud digna y coherente en consecuencia, sino todo lo contrario: que deben aferrarse con mayor fuerza a sus sillas.
Es que, como es bien sabido, no puede alimentarse los bolsillos de la angurria con actitudes honrosas y dignidad, mucho menos aún cuando se trata de la izquierda chanta y clerofascista , rendida a los pies del salvador de la patria, el cura con hijos Fernando Lugo. LAW

No hay comentarios: